Agenda

7 cosas que NO hay que hacer en un viaje fotográfico a India

Cuando lo correcto es una descortesía inaceptable .

Sandhus, Foto Harry FischA lo largo de los viajes  vas coleccionando anécdotas, experiencias y, si te fijas suficientemente, hasta normas de educación.  Con el tiempo puedes llegar a entender que a menudo lo correcto y aceptable en tu país no es más que un insulto en el lugar  en el que te encuentras.  Se trata de cultura, de conocer cómo entienden en diferentes países la vida y la forma de relacionarse.  Para poner mi granito de arena propongo unas  pequeñas pistas con la esperanza  de  mejorar  la comunicación cultural.

LAS 7 COSAS QUE NO HAY QUE HACER

1.- .- Creer que el aire acondicionado va a funcionar siempre.- Esta es la modalidad hotelera estrella. Has conseguido -estás encantado contigo mismo- esa habitación con  vistas al Ganges, en lo alto de la última planta.  Un ático, magnífica situación y te habían dicho que iba a ser dificiliísmo. Solo por el aire acondicionado estás dispueso a pagar casi sesenta euros.  Lo cierto es que suele funcionar bién hasta que una sobrecarga en el suministro eléctrico te recuerda que esto es Benarés , que lo de enfrente es el Ganges y que estás en la India.

Tienda Mandvi, Foto Harry Fish

2.- Pensar que te has convertido en Indio por la falda-pantalón que llevas puesta (te dijeron que era un Dhoti).- Pués va a ser que no: es una falda pantalón de turista medio, Jipi (la coma está bién puesta y no quería decir "Hippie", tú ya me entiendes).  Si a eso unes un  par de "Rastas" y mochila pequeña de cuero, ya eres un local de toda la vida.  En el fondo, salvo el hecho de que ha aumentado la probabilidad de ligar con la americana con la que te cruzaste esta mañana, solo tienes una ventaja real:  los precios del té  habrán bajado para tí. En lugar de pagar siete veces más por un "Chai" (té ), tarifa habitual para un turista sin disfraz, vas a pagar solo el doble, es decir, veinte céntimos de euro en lugar de los diez que se pagan por ahí.

3.- Fotografiar a un santón cuando tú estás arriba y él abajo. Tengo un amigo que hace las fotos con  una de esas cámara con pantallita y sin visor.  Siempre las hace  alejando los brazos de su cuerpo, estirándolos como si de este modo,  acercándo el instrumento al sujeto, la foto fuese más auténtica y eficaz.  Lo cierto es que el fotografiado queda en una situación física de inferioridad: este abajo, aquel  arriba como si tratara de un insecto estudiado por un entomólogo.

Sandhus, Foto Harry Fish

4.- Deducir que el Sadhu es pobre porque no tiene dinero.- Como me decia un amigo respecto a los Cubanos: no tener dinero no es lo mismo que ser pobre. Y más cuando la renuncia a los bienes materiales es la parte esencial de tu compromiso religioso. Los Saniasis o Sadhus  renuncian a los bienes materiales para vivir de la caridad.  Los Naga Sadhus llegan en su compromiso a vivir prácticamente desnudos en contacto con elementos impuros  para demostrar su desapego hacia los sentimientos humanos.

 

5.- Andar calzado en un templo.- En los templos Hindús es una tremenda falta de respecto entrar calzado. El problema es que a veces no sabemos distinguir lo que es un templo. En la última expedición a Benarés, atraido por unas velas en lo alto de unos escalones me apresté a a bajarlos para tener un mejor angulo de visión. Cual no sería mi sorpresa cuando todo el mundo empezó a gritarme...  Resulta que esos escaloncitos llevaban a una plataforma baja donde estaba el pequeño altar de un templo ! Me deshice en excusas.  Desde entonces me lo pienso dos veces antes de dejarme llevar por el entusiasmo.

Velas en un templo de Katmandu, Foto Harry Fish

6.- Creerte que has llegado  cuando lo dice el conductor de tu Rickshaw .- Grave e imperdonable error, especialmente en Benarés.  Si eres conductor de rickshaw, La práctica habitual consiste en decirle al cliente que la carrera solo va a costar  15 rupias.  En esta modalidad el conductor, que ha aceptado lo que tu creias era un precio absurdamente bajo, te dice que ya has llegado a Manikarnika Gath.  Bajas encantado para enterarte,  cinco minutos después, en medio de la nada, que te ha dejado a medio camino. Lo cierto es que tú habias pagado la mitad de lo que sabias que  valía la carrera.

7.- Hacer una ofrenda a un  monje budista pasado el mediodia  y preguntarle si le ha gustado.- Lo primero es en sí  mismo una descortesía y lo segundo le obliga - de asentir- a mostrar que sigue apegado a los bienes materiales. Si el monje negase, habría demostrado, además de mentir, que es una persona poco atenta a tus sentimientos .

Templo de Yangon, Foto Harry Fish

Si quieres saber más de Harry Fisch esta es su pagina  www.nomadexpediciones.com

Está aquí: Home Noticias Agenda Reportajes El rincón de Harry Fisch 7 cosas que NO hay que hacer en un viaje fotográfico a India